El Consejo de Ministros, en su última reunión del 2024, aprobó el Real Decreto-ley 9/2024 del 23 de diciembre por el que se adoptan medidas urgentes en materia, económica, tributaria, de transporte y de Seguridad Social y se prorrogan determinadas medidas para hacer frente a las situaciones de vulnerabilidad social. Según el Periscopio Laboral de PwC no es el mejor momento para la seguridad jurídica en los departamentos de RRHH de las empresas, que se mueven en entorno imprevisible e incierto. En este contexto, es clave contar con un Programa de Compliance Laboral basado en la Norma UNE 19604. Veamos cómo hacerlo.
“La norma UNE 19604 de compliance socio laboral es un hito más y supone una herramienta indispensable en las empresas para la normalización de los sistemas de gestión del cumplimiento de la normas laborales a través de un conjunto de políticas, objetivos, principios, procedimientos y procesos, y recursos internos con indicadores y controles que no solo va a incidir en la eficiencia de las organizaciones, sino que también les permitirá a las empresas avanzar en el bien general alineándose en la Agenda 2030 de Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)”, afirma Carlos de la Torre, socio de GA_P.
El cumplimiento normativo en materia laboral en un elemento crítico para el buen gobierno de las empresas. Una cultura positiva de compliance sociolaboral permite una gestión eficaz de los riesgos y ayuda a prevenir penalizaciones por posibles incumplimientos en un contexto de hiper regulación normativa del mercado del trabajo. Además, mejora la reputación corporativa y la sostenibilidad social.
Así, el informe “Cómo implantar un programa de compliance laboral eficaz”, elaborado por ORH con la dirección técnica de GA_P y la colaboración de Betterfly y Cegid, analiza cuatro preguntas claves del modelo de gestión del cumplimiento normativo.
¿Por qué y para qué?
¿Por qué y para qué necesitan las empresas un programa de compliance laboral? Un programa de esta índole es una ventaja competitiva y contribuye a la mejora continua de la organización.
Por otra parte, refuerza el compromiso corporativo en materia de ESG al garantizar el cumplimiento ético y las políticas internas de la compañía. Los programas de compliance laboral son un excelente aliado para desarrollar iniciativas de ESG relacionadas con los derechos humanos, la diversidad e inclusión social, la seguridad y salud laboral y la atracción y retención de talento.
Y, sobre todo, permite gestionar a corto, medio y largo plazo todos los riesgos al incluir políticas, procedimientos, recursos e indicadores de desempeño.
¿Qué dimensiones tiene?
El cumplimiento de la normativa laboral no solo es importante a corto plazo. Es necesario tener una visión estratégica para abordar un plan a largo plazo para gestionar las RRLL que comienza con identificar y controlar los posibles riesgos de incumplimiento laboral.
Para ello es necesario establecer un programa de prevención del incumplimiento a través de una función de vigilancia para evitar la judicialización y las contingencias económicas.
Este programa tendrá que personalizarse a cada empresa teniendo en cuenta las características propias de cada empresa, sector o incluso país. Y, por último, el programa no puede quedarse en papel mojado. Hay que favorecer la cultura del cumplimiento diseñando un sistema con acciones que consoliden la adopción de procesos, interacciones y decisiones.
“Tener un compromiso con el compliance en todas las áreas añade robustez y ayuda a crear una cultura corporativa de cumplimiento, que es fundamental”, comenta Andrew Ward, socio de GA_P.
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¿Cómo diseñarlo e implantarlo?
El primer paso es realizar un mapa de riesgos para definir, identificar y analizar los riesgos socio laborales. A continuación, crear un plan de acción con iniciativas correctoras en caso de no conformidad. Una vez, concretado esto, es importante establecer un sistema de información interno relativo a incumplimientos laborales.
Todo esto debe completarse con un código de conducta que establezca los derechos y obligaciones de los trabajadores. Finalmente, es de vital importancia que alguien de la empresa se responsabilice de todo el compliance, por lo que crear una labor compliance officer sería perfecto para gestionar el sistema de cumplimiento.
“Un problema del compliance laboral es el gasto económico que hay que desembolsar para su diseño e implantación, que puede suponer una pérdida de competitividad respecto de competidores que no cumplan la normativa. Es importante concienciar de la necesidad de instaurar un compliance laboral en la compañía y, por tanto, dar un valor diferencial a las empresas que lo instauran, podría ser un gran impulso para que más empresas decidan implementarlo”, asegura Carlos de la Torre, socio de GA_P.
¿Quiénes lideran el proyecto?
El programa de cumplimiento laboral presenta un marcado enfoque jurídico y un nivel creciente de complejidad debido a la constante evolución de la normativa en materia laboral, así como al aumento de los riesgos y sanciones, tanto económicas como penales, asociadas a posibles incumplimientos.
Esto hace necesario una estructura que incluya un nivel de supervisión a cargo del consejo de administración o del propietario de la organización, un responsable de cumplimiento laboral (Labor Compliance Officer) encargado de la gestión, un nivel operativo compuesto por los departamentos de relaciones laborales y recursos humanos, y un rol de observación desempeñado por los representantes de los trabajadores y los comités de empresa.
Así, la responsabilidad de gestionar el cumplimiento en las empresas debería recaer en un directivo especializado en relaciones laborales. Este profesional debe contar con autonomía, independencia, autoridad y la competencia necesaria, además de disponer de recursos suficientes, tanto internos como externos, para garantizar el seguimiento y cumplimiento efectivo de la normativa aplicable.
Como hemos visto, el compliance laboral no solo es una necesidad en el entorno regulatorio actual, sino una oportunidad para que las empresas fortalezcan su cultura corporativa, mejoren su reputación y contribuyan activamente a un desarrollo más sostenible. Diseñar e implementar un programa eficaz de cumplimiento no solo ayuda a gestionar riesgos y evitar sanciones, sino que también permite alinear la estrategia empresarial con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, promoviendo un entorno laboral más ético, seguro y competitivo.
